COMIENZA EL VERANO EN LMB
PALCO PREMIER
*Arranca el circuito de verano; el domingo, las Mayores
*Primera reunión de la LMP, con miras a 2017-2018
*La temporada pasada, un éxito en todos sus aspectos
Jorge Luis Telles Salazar
Arranca ya la temporada 2017 de la Liga Mexicana de Béisbol y este fin de semana la actividad se generalizará en casi todas las plazas del circuito de verano.
La excepción lo será la ciudad de Durango y sus Generales, quienes verán acción en su casa hasta mediados de abril puesto que será hasta entonces cuando su estadio esté en condiciones decentes, gracias al respaldo del gobernador de aquella entidad, José Rosas Aispuro.
Una campaña precedida de una serie de situaciones que, incluso, llegaron a poner en duda la viabilidad del circuito y de su próxima temporada.
Por un lado, precisamente, los problemas en Durango, por la lentitud de las obras de restauración de su parque. Una semana antes, incluso, estaba decretada la imposibilidad de los Generales para jugar en esta campaña.
La amenaza de los Tigres de Quintana Roo de retirarse de la Liga por cuestiones económicas. Fue necesario un rescate de gente estrechamente ligada al béisbol, encabezada por el legendario pitcher mexicano, Fernando Valenzuela, asociado con otros empresarios, aficionados a este deporte.
La mexicanización de los Diablos Rojos del México.
Y las diferencias que se suscitaron entre los dos grupos de poder de la Liga Mexicana de Verano, justamente por el control de la misma.
Todo superado, afortunadamente.
Y la Liga Mexicana ya está en marcha, con sus 16 equipos, englobados en dos grandes divisiones: Norte y Sur.
Por el lado del Norte: Acereros de Monclova, Toros de Tijuana, Sultanes de Monterrey, Vaqueros de Unión Laguna, Diablos Rojos del México, Saraperos de Saltillo, Generales de Durango y Rieleros de Aguas Calientes.
Y por el Sur: Leones de Yucatán, Tigres de Quintana Roo, Pericos de Puebla, Olmecas de Tabasco, Piratas de Campeche, Águila de Veracruz, Guerreros de Oaxaca y Bravos de León.
Teóricamente favoritos: Acereros y Leones.
Dos trabucos, hasta donde sabemos.
Efectivamente, dentro de esos 16 hay muchos equipos muy malos en la Liga Mexicana; pero otros muy buenos también. Habrá que seguirlos con atención.
Y después hablamos.
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Que la pasada temporada de la Liga Mexicana del Pacífico “fue un gran año”, coincidieron, en forma unánime, los presidentes de las ocho franquicias del poderoso circuito invernal, al terminar, en la ciudad de Hermosillo, su primera junta oficial, de cara a la edición 2017-2018, que arrancará en octubre venidero.
En realidad, ninguno de ellos ha descubierto la popular agua tibia.
Desde su conclusión, tras el epilogo de la Serie del Caribe, quedó claro que se trató de una de las más exitosas temporadas de toda la historia de la Mexicana del Pacífico. Y el torneo caribeño, aquí en Culiacán, constituyó la rutilante cereza del pastel.
Culiacán, por ejemplo, se consolidó como la mejor plaza de toda la Liga, con un promedio de taquilla de 18 mil por partido, solo 2 mil por debajo de su capacidad; le siguió Hermosillo y luego Mexicali, Mazatlán y Obregón. Ciudades como Navojoa, incluso, reportaron magnificas entradas, como consecuencia natural de los buenos resultados de su plantel.
Así las cosas, las expresiones de los presidentes de los clubes no son para nada sorprendentes y dejan ver, naturalmente, una profunda satisfacción.
Ahora, sin embargo, viene el gran reto. El más difícil de todos:
Sostener ese buen momento y prolongarlo hasta donde sea posible, lo que se logrará exclusivamente con la unión de dos elementos fundamentales: por un lado, el conservar el nivel competitivo de los ocho equipos y por el otro continuar con los planes de innovación y creatividad que año con año ofrece el circuito de invierno.
De hecho, los esfuerzos en esta dirección tendrán que redoblarse de manera sustancial porque para la siguiente campaña ya no estará la Serie del Caribe como atractivo adicional. Esta, como sabemos todos, se va a Venezuela.
Se trata de un gran reto, efectivamente; pero apto de superarse.
Si los señores directivos ponen todo lo que está de su parte, la reacción de la fanaticada se dará en forma natural. Año con año crece el fervor por este deporte y se consolida, además, como el entretenimiento por excelencia en las ocho plazas de la Liga Mexicana del Pacífico.
Así es. Simple y sencillamente.
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Y bien.
La reunión del martes próximo pasado, en la ciudad de Hermosillo, fue la clásica, posterior al cierre de una temporada:
= Análisis general.
= Informe de la situación financiera y deportiva.
Y:
= Expectativas para la siguiente campaña.
De lo primero, sin entrar en números, ya hicimos mención: fue un “gran año”, coincidieron los señores presidentes y eso lo dice todo.
Con relación a la que viene, definido que el arranque será el 10 de octubre; que se mantendrá el sistema de competencias y también el modelo de refuerzos para los “play offs” y lo que está en duda es lo referente al Juego de Estrellas, el cual registró, en noviembre pasado, un moderado éxito en Ciudad Obregón.
Nada definido. Primeras pinceladas para el futuro inmediato.
A fines de abril se llevará a cabo una nueva reunión y en esta ya se tomarán acuerdos concretos. Es el guión que habitualmente suelen seguir los señores jerarcas del poderoso circuito invernal.
Ya les contaremos.
A manera de colofón.
También las Ligas Mayores inician su temporada 2017. Este domingo en las principales ciudades de Los Estados Unidos.
Cachorros de Chicago, entre los grandes favoritos.
Y con esto, nos despedimos de usted, amable lector, con nuestros deseos de siempre: que Dios los bendiga.